Crónica 10ª jornada Primera División Andaluza. Grupo Córdoba. Temporada 2019/2020.
Enrique y Ávila con sus goles, doblegan a un serio conjunto pozoalbense.
PEÑA LOS LEONES DE POZOBLANCO 0
VILLA DEL RÍO C.F. 2
Peña Los Leones- David Granados, Miguel Chaves, José Ariza, Felipe Javier, Miguel, Rafa Ariza, César, Carlos, Felipe Herrero, Luís y Sancho. También jugaron: Alfonso, David Rubio, Fran y Rafa Punto.
Villa del Río- Sergio Hinojosa, Álvaro, Vidosa, Edu Baena, Emilio, Cris, Ávila, Madueño, Agudo, Enrique y Dani Frías. También jugaron: Moro, José Luís, Zamora, Julio y Hugo.
Árbitro- Rafael García Jiménez. Estuvo auxiliado en las bandas por Maya Cubero y González Torres. Mostró tarjetas amarillas al local José Ariza y a los visitantes Emilio y Enrique
Goles- 0-1 (min. 62) Enrique 0-2 (min. 84) Ávila
Incidencias- Un centenar de espectadores se dieron cita en el Eleuterio Olmo Bermejo de Pozoblanco, desafiando las inclemencias meteorológicas. Y es que la tarde no pudo ser más desapacible, con 6º de temperatura al inicio de un choque, que también tuvo al viento y la lluvia como protagonistas.
Comentario- Francisco J. García
Suma y sigue. El Villa del Río C.F. encadena su sexta jornada sin perder, lo que le ha servido para ascender al tercer escalón clasificatorio, tras imponerse con cierto sufrimiento a un cuadro vallesano, que opuso una seria resistencia, pero que finalmente terminó por claudicar ante el acierto ofensivo de su rival.
Los jugadores villarrenses celebraron su victoria en el vestuario.
El partido fue el típico de la categoría, con una mayor igualdad, de lo que pueda dictar la clasificación. La intensidad, la presión y la concentración en ambos bandos, fue la nota predominante desde el inicio. Nadie quería regalar nada y el objetivo era agobiar al contrario, para no dejarle pensar y provocar los errores. La lucha en medio campo era tremenda y el juego carecía de continuidad, ya que enlazar tres o cuatro pases seguidos era misión imposible.
Las hostilidades se rompen con una jugada que bien pudo acabar en gol, tras un balón perdido en medio campo, Ávila ve a David Granados adelantado y su disparo desde 40 metros acaba con el balón impactando en el larguero de la portería local.
La Peña de Los Leones en sus intentonas ofensivas, daba mayor sensación de peligro por la banda izquierda donde Luís era un auténtico incordio para Álvaro. Por esa banda llegaría la primera ocasión local, José Ariza pone un centro pasado, que empalma Sancho, obligando a Sergio Hinojosa a enviar el balón a córner.
Pero poco a poco comenzaba a aflorar el juego combinativo de los villarrenses, que le hacían generar ocasiones de peligro. Aunque tampoco estuvieron demasiado finos en esta faceta ya que faltaba, tanto precisión en los pases, como instinto goleador en los remates. Así Agudo (min. 28) remató muy centrado tras deshacerse de Felipe Javier.
Rondando la media hora de juego, el larguero volvió a ser protagonista en el despeje del meta local, tras córner botado por Cris. Con los villarrenses dando una mayor muestra de peligrosidad, Moro (min. 36) remataría flojo pero colocado, obligando a David Granados a estirarse hasta la base del poste. Esta jugada acabaría en saque de esquina, y tras el lanzamiento de Cris, con varios remates y despejes en el área de los jugadores de uno y otro equipo, el balón volvería a toparse, por tercera vez, en el palo más largo de la portería local.
Se desesperaba Eduardo Fernández en el banquillo visitante, ya que su equipo no sabía reflejar en el marcador ni el juego ni las ocasiones generadas. Encima los locales estuvieron a punto de ponerse por delante, cuando tras un fallo de Álvaro, Luís encuentra una autopista por su banda y su centro lo remata Carlos, completamente solo, fuera.
Tras el descanso y antes del primer minuto, los villarrenses dispusieron de una clara ocasión de gol. Tras un robo de balón en campo rival, Dani Frías arranca por su banda y peca de egoísmo, al rematar a puerta y no ver a su compañero Moro, que estaba solo y desmarcado en el segundo palo.
Felipe Herrero protege un balón, ante el acoso de Álvaro.
Los locales lo siguen intentando aplicando mucha intensidad en todas sus acciones y buscando las bandas como principal vía de penetración, con jugadas de dos contra uno. Felipe Herrero y Sancho aportaban trabajo y sabían desenvolverse con acierto jugando de espaldas y dejando balones de cara a sus compañeros, pero al equipo que entrena Eusebio Calero, le faltaba ese jugador con llegada, que entrara desde segunda línea y desbordara el sistema defensivo villarrense.
Un lanzamiento directo de falta del lateral Miguel Chaves puso el uy en la grada, ya que el balón rozó la escuadra izquierda de la portería de Sergio Hinojosa.
Cuatro minutos más tarde, el Villa del Río comenzaría a desnivelar la balanza a su favor. Y fue tras una jugada de astucia. Cris pone rápido el balón en juego, en el saque de una falta, sobre la posición de Enrique que en el área, regatea a su marcador y supera a David Granados con un remate muy colocado.
Con casi media hora de juego por delante, el gol tranquiliza a un Villa del Río obligado a fajarse defensivamente ante el acoso del conjunto rojiblanco. La insistencia local apenas generó ocasiones nítidas de gol, pero no es menos cierto que dispusieron de un sinfín de saques de esquina y lanzamientos de falta, que sembraban una lógica inquietud en la zaga visitante.
Cris y Dani Frías presionan el control del balón de un rival.
Lógicamente con el paso de los minutos y con el marcador adverso, los pozoalbenses tienen que arriesgar tácticamente. Empiezan a aparecer desajustes defensivos, que los villarrenses intentan aprovechar a la contra. Moro (min. 76) perdonaría lo imperdonable, cuando Dani Frías con su pase, lo dejó mano a mano con David Granados, pero su remate no encontró portería.
El partido seguía abierto. Eusebio Calero mete en el campo todo su arsenal ofensivo, mientras que Eduardo Fernández hace todo lo contrario refuerza el medio campo con la entrada de Julio y Hugo.
La sentencia villarrense llegaría a seis minutos del final, cuando Ávila cazó un balón en el área y su remate seco y potente supero al portero local. El partido parecía estar encarrilado pero no decidido, ya que el partido de La Rambla seguía estando en la mente de todos los visitantes. Esas dudas podían haberse revivido, si el asistente de la banda de tribuna, no hubiera levantado su banderín en un remate de Rafa Ariza, que acabó en el fondo de la portería visitante. Pero la posición de fuera de juego del seis local, dinamitó la posible reacción.
Enrique conduce un balón ante la presión de Rafa Ariza.
Cinco minutos de añadido que se desarrollaron bajo el mismo guión, con los locales acosando el área de un rival que se defendía con un cierto orden. El pitido final culmina la buena dinámica villarrense que acumula seis partidos sin perder y tres victorias consecutivas. Mientras que el cuadro local sigue sin encontrar una mínima efectividad como local, donde tan solo ha sumado un triunfo en sus cinco comparecencias.
El próximo domingo el Villa del Río C.F. recibirá en el Polideportivo Municipal (17 horas) la visita del C.D. Egabrense, en partido correspondiente a la 11ª jornada liguera.