domingo, 16 de diciembre de 2018

Los errores defensivos vuelven a condenar al Villa del Río C.F.

 

Crónica partido 14ª jornada de liga de la Primera División Andaluza. Grupo de  Córdoba.

 
Los montillanos jugaron en inferioridad numérica durante 70 minutos.
 

Montilla C.F.  4  Villa del Río C.F. 2

 

Montilla- Manolo, Antonio Luque, Carmona, Caballero, Robles, Soto, Sillero, Luís Castro, Onieva, Ávalo y Maleno. También jugaron: Juan, Jorge, Hierro, Luís García y Joseda.

Villa del Río- Miguel Ángel, Álvaro, Soto, Agapito, Madueño, Cris, Javi Cobos, Pablo, Edu, Dani Frías y Juampe. También jugaron: Cámara, Antolín, Molleja y Eduardo.

Árbitro- Rafael Soler Romero. Estuvo auxiliado en las bandas por Gutiérrez Jiménez y Gutiérrez Pérez. Amonestó al local Caballero y a los visitantes Agapito, Edu, Pablo, Soto y Madueño. Expulsó con tarjeta roja directa al local Antonio Luque (min. 21).

Goles-  1-0 (min. 7) Ávalo  1-1 (min. 12)  Pablo  2-1 (min. 36) Onieva  2-2 (min. 64) Caballero en propia puerta  3-2 (min. 75) Maleno  4-2 (min. 83) Ávalo.

 

Incidencias- Unos trescientos espectadores se dieron cita en el Estadio Municipal de Montilla, en una mañana muy fría. Un fuerte viento acrecentó, más si cabe, el descenso térmico.

 

Comentario-  Firma: Francisco J. García

 

La conocida frase que popularizó Helenio Herrera, mítico entrenador entre otros equipos del Atco. de Madrid, Sevilla FC, CD Málaga, FC Barcelona e Inter de Milán, que decía que "al fútbol se juega mejor con diez, que con once", siempre ha generado gran controversia. Sin embargo en este partido, el cuadro vinícola, la volvió a hacer buena, ya que pese a estar en inferioridad numérica desde el minuto veintiuno de juego, tras la autoexpulsión de su lateral Antonio Luque.

 

Ávalo, autor de dos goles, presiona el pase de Madueño.

 

El Montilla fue más práctico y efectivo. Tuvo mucha más pegada que su rival y aunque su juego tuvo demasiadas intermitencias, supo hacer una perfecta lectura del envite. No le importó que el Villa del Río le arrebatara la posesión del balón durante los tres primeros cuartos de partido ya que era consciente que dado su poderío ofensivo, a la más mínima concesión de su oponente, no le sería difícil hacer gol. Y supo suplir con intensidad, organización y trabajo, el hecho que tuviera que disputar más de tres cuartos del partido, con un jugador menos.

Así en el minuto siete ya contaban los amarillos con ventaja en el marcador, fue tras un robo de balón en medio campo, donde Luís Castro mete un pase en profundidad sobre los dos centrales rojillos y el perfecto desmarque de Ávalo le permite marcar a portería vacía, tras haber superado previamente la salida desesperada de Miguel Ángel.

Este tempranero gol no cambia en absoluto el guión del partido, ya que la iniciativa en el juego la llevan los villarrenses ante un cuadro local que se mantiene firme en su parcela.

Un perfecto lanzamiento directo de falta de Pablo, muy cercano a la línea de fondo, propicia el gol del empate y devuelve las ilusiones a los jugadores visitantes. Pero a estas alturas de partido ya iban apareciendo algunas lagunas defensivas en el equipo que entrena Eduardo Fernández, y un minuto más tarde, un remate de Onieva se marcha por encima del larguero tras haber botado previamente el balón en el césped.

 

Onieva controla un balón ante la presencia de Soto.

 

La expulsión del local Antonio Luque complica notablemente el partido a su equipo, obligado a jugar en inferioridad durante más de una hora de partido. Su técnico Rafa Carrasco opta por una defensa de tres, pasando Caballero del eje de la misma al lateral derecho. Fueron unos minutos de ciertas dudas, aguardando a ver como asimilaba el equipo esta nueva situación. El Villa del Río pudo haber tomado ventaja en el marcador ya que Agapito tuvo en su cabeza el gol, pero su remate de cabeza, completamente solo, en el área montillana, se fue fuera, cuando tenía toda la portería para él.

Una posterior tarjeta amarilla por una fea entrada, unido a ciertas molestias que se agudizaron en el calentamiento, provocaron que el central rojillo tuviera que abandonar, el terreno de juego, para no regresar más, antes del descanso.

El Montilla se iría a vestuarios con ventaja en el marcador, ya que un centro de Maleno desde la banda izquierda fue rematado de cabeza por Onieva, ante la pasividad de la zaga visitante, que se vio sorprendida en dicha acción.

La entrada de Antolín ya había dado una mayor claridad de ideas a su equipo, que jugaba con actitud y mucho criterio, aunque superar la última línea defensiva local se convertía en su asignatura pendiente.

Los minutos pasan en este segundo acto, sin que ofensivamente haya mucho que destacar. Hasta que en el minuto veinticinco, los villarrenses lograrían igualar de nuevo la contienda, tras un autogol de Caballero, que despejó hacía su propia portería un centro muy cerrado de Soto.

 

Juampe conduce el esférico ante el acoso de Caballero.

 

Quedaban veinticinco minutos de juego por delante, quizás demasiados para asegurar la posible sorpresa. Sobre todo por que el Montilla, con muy poco que hiciera ofensivamente, casi siempre generaba peligro. Y es que la fragilidad de la zaga villarrense, daba demasiadas concesiones. Así, en una de ellas, Miguel Ángel sale por uvas y el centro de Ávalo desde la línea de fondo y casi sin ángulo, hace que el balón se paseé por la línea de gol.

A estas alturas de partido los locales ya habían tocado arrebato. La entrada de Jorge y Juan les da mayor profundidad por la banda derecha, mientras que por la izquierda Carmona y Maleno, ofrecen alternativas.

Los villarrenses tratan de fajarse en defensa y les cuesta mantener el balón en su poder. A quince minutos del final todo su trabajo y sus esperanzas de sacar algo positivo, se desvanecen tras el tercer gol local, Fue tras otro monumental fallo defensivo. Un centro de Jorge al segundo palo, se lo come literalmente Javi Cobos y Maleno a su espalda, no desaprovecha el regalo, y bate desde cerca de Miguel Ángel.

 

La defensa villarrense tuvo que emplearse a fondo ante los ataques locales.

 

El cuarto gol local cerró definitivamente el partido y llegó tras un fallo garrafal de Pablo que perdió un balón en el borde de su propia área, lo que aprovechó Jorge para llegar a la línea de fondo y servir el llamado pase de la muerte para que Ávalo marcase a portería vacía.

Con el partido decidido, las ocasiones se sucedieron en una y otra área, aunque finalmente y tras cuatro minutos de alargue, Soler Romero, que dicho sea de paso hizo un arbitraje muy correcto, decretó el final del partido.

El Villa del Río C.F. vuelve a caer derrotado y se aproxima peligrosamente a los puestos de descenso, de los que se encuentra a un solo punto. Una vez más, su falta de contundencia en las áreas, deja en un segundo plano el juego realizado y la actitud mostrada. Y es que tanto el peso de la tabla clasificatoria como las propias limitaciones del equipo, siguen pasando factura.

El próximo domingo día 23 de diciembre el conjunto villarrense retornará al Polideportivo Municipal para cerrar la primera vuelta liguera, en el último partido, antes del paréntesis navideño. Su rival será el Salerm Cosmetics Puente Genil B, actual tercer clasificado. El partido comenzará a partir de las 17 horas.