Crónica partido 10ª jornada de liga de la Primera División Andaluza.
Grupo de Córdoba.
Un tempranero regalo vuelve a condenar a los villarrenses a la derrota.
C.D. Montalbeño 1 Villa del Río C.F. 0
Montalbeño- Isaac, Ruso, Cantillo, Carmona, Muñoz, Joselillo, Jesule, Peque, Miguel, Juan Blanco y Juanlu. También jugaron: Rubio, Melli, Adri, José Rafa y Joselu.
Villa del Río- Corona, Mariano, Soto, Agapito, Obregón, Cris, Edu, Muñoz, Mesa, Figo y Barbecho. También jugaron: Álvaro y Ángel.
Árbitro- Germán Matías Caballero. Estuvo auxiliado en las bandas por Carreras Castillo y Arroyo Martínez. Amonestó a los locales Cantillo, Joselillo, Muñoz y Juan Blanco y al visitante Cris.
Goles- 1-0 (min. 4) Juan Blanco de penalti.
Incidencias- Unos ciento veinte espectadores se dieron cita en el Estadio Municipal Nuevo Calvario de Montalbán. Antes del inicio del partido se guardó un minuto de silencio en memoria de un socio del C.D. Montalbeño.
Comentario- (Firma: Francisco J. García)
Por reiterativo, comienza a ser cansino. Y más si afecta de manera negativa al rendimiento del equipo. El caso es que el Villa del Río C.F. volvió por enésima vez en esta temporada a encajar un gol en los primeros minutos de partido. Y de nuevo tras un monumental fallo defensivo. Esa fue la historia de Palma del Río, Almodóvar del Río y Bujalance. Y ahora también en Montalbán, donde a las primeras de cambio se conceden regalos, que los rivales no desaprovechan, y que prácticamente te condenan a jugar contra remolque desde el pitido inicial.
Esa volvió a ser la crónica en la visita al Nuevo Calvario. Se jugaba el minuto tres de partido cuando en un ataque local, Mariano hace una entrada descompensada y a destiempo a Cantillo, cuando este jugador pisaba el área local, pero se encontraba de espaldas a la portería y en las proximidades de la línea de fondo. El derribo tan claro como innecesario, fue sancionado por el árbitro como penalti. El goleador local Juan Blanco con un lanzamiento al estilo Panenka, superó a Corona y anotó el que a la postre sería el único gol del partido.
Figo trata de conducir el balón entre una nube de jugadores.
En los primeros compases el partido que enfrentaba a dos equipos con urgencias, por su delicada trayectoria y su situación clasificatoria, se rompía. Los locales con el marcador a favor no les importaba cederle la posesión del balón al Villa del Río. Su seguridad defensiva es su principal baza y las jugadas a la contra su esperanza.
Pese al mazazo psicológico sufrido, los villarrenses trataron de reaccionar. En medio campo, comenzaron a tratar de hilvanar juego, pero les costaba. Entre la intensidad defensiva de los locales y alguna imprecisión en las entregas, ese dominio visitante resultaba ofensivamente estéril. Tan solo reseñar un remate cruzado desde el vértice del área de Edu (min. 12) que se fue fuera por poco. Y hasta el epílogo de este primer periodo no volvería a llegar algún peligro sobre la portería de Isaac. Primero fue con un remate potente de Figo (min. 43) que supo aprovechar un balón que Muñoz con su cabeza situó en el área. Y posteriormente tras una jugada trabada en el área local, donde ni defensores ni atacantes controlaban el balón, éste llega a Mesa que en una posición inmejorable, pierde esa ventaja y termina cayéndose. Presionado por su marcador, remató mordido impactando el balón en el poste.
Edu trata de escapar de la marca de Rubio.
Tras el descanso, el Villa del Río sigue llevando la manija del partido, el equipo juega con mucho criterio, moviendo la pelota de un lado a otro tratando de buscar superioridad por las bandas. Pero los locales se fajaban defensivamente y sabían hacer una lectura correcta del partido para sus intereses. Así cualquier situación de ventaja táctica blanquilla, los villarrenses jugaron con su segunda equipación por coincidencia de colores con el cuadro local, automáticamente se traducía en una falta táctica que paraba el juego y se producía una inmediata reorganización de efectivos. Estas acciones que fueron bastante reiterativas, no sufrieron el debido castigo por Matías Caballero que estuvo demasiado benevolente.
Los pupilos de Tomás Joven buscan el gol del empate desde cualquier posición, pero sin éxito. Así el veterano Obregón disparó desde
Barbecho trata de controlar el esférico ante la mirada de dos contrarios.
Los minutos pasaban en contra de los intereses villarrenses. Su técnico se la juega con la entrada de Ángel y deja tan solo tres jugadores en defensa. Soto y Edu castigan por sus bandas, pero las dos líneas de cuatro que el entrenador local Miguel Ángel Prieto en las inmediaciones de su propia área, son un muro infranqueable.
Las prisas y la presión del marcador en contra, juegan en ocasiones malas pasadas a los villarrenses, que se olvidan de darle una necesaria pausa a su juego y caen en precipitaciones. En el ochenta y cuatro, Edu dispone de la ocasión más clara para empatar, pero tras regatear a dos defensores en el borde del área, su remate se fue arriba por muy poco.
Los últimos minutos fueron de ida y vuelta ya que los locales, a la contra dispusieron de alguna oportunidad, pero fallaron en la definición. Un centro chut de Figo, bien atajado por Melli, fue lo último reseñable del envite.
El local Rubio lleva el balón ante la presión de Muñoz.
Al final el triunfo y los tres puntos se quedaron en casa, por que los montalbeños estuvieron más certeros en ambas áreas, lugares estratégicos donde se decide el resultado de un partido. A los villarrenses la indolencia en ambas áreas les pasó factura, aunque la esperanza es que jugando como en la segunda mitad, muy pronto tiene que cambiar la dinámica de resultados.
El Villa del Río C.F. vuelve a volverse de vacío de Montalbán donde no puntúa desde la temporada 09/10 (0-0) y no vence desde hace 26 años, temporada 91/92 (1-2). Se podía pensar en la maldición del Nuevo Calvario, pero mejor será solucionar de inmediato esos tempraneros errores defensivos, que tantas facturas están pasando.
El próximo domingo, el Villa del Río C.F. recibirá en el Polideportivo Municipal (17 horas) la visita del Menciano Atco. actúal segundo clasificado, pese a ser un equipo que se estrena en la categoría en la presente temporada.