Crónica
partido 16ª
jornada de liga de Regional Preferente de Córdoba.
Baenense
Atco. 4 Villa del Río C.F. 2
Baenense-
Dani, Gamba, Germán, Mesa, Felipe, Bibi (Pablo min. 91), Reyes
(Alberto min. 66), Pipa, Alex (Javi Hornero min. 87), Álvarez (Tato
min. 70) y Vera (Hilario min. 79).
Villa
del Río- Torralba (Marcial min. 46),
Rubio (Soriano min. 35), Antonio Córdoba, Salva, Cristian, Luís
Córdoba (Germán min. 35), Sergio Robles (Agudo min. 74), Jacinto,
Majuelos, Muñoz (Pedrito min. 84) y José Luís.
Árbitro-
Cabrera Moscardó. Estuvo auxiliado en las bandas por Valero Toledo y
Ramírez Jurado. Amonestó a los locales Mesa, Álvarez y al
entrenador Juan Mora y a los visitantes Jacinto, Germán, Antonio
Córdoba y Marcial. Expulsó con tarjeta roja directa al visitante
Salva (min. 22).
Goles- 1-0
(min. 14) Mesa 2-0 (min. 15) Pipa 3-0 (min. 41) Pipa 3-1 (min. 44)
Majuelos 3-2 (min. 83) Majuelos 4-2 (min. 90) Pipa.
Incidencias-
Unos centenar de espectadores se dieron cita en el Polideportivo
Municipal Juan Carlos I de Baena. Dado el tardío horario de comienzo
del partido (18 horas) se tuvo que disputar el mismo casi en su
totalidad con luz artificial.
Comentario- (Firma:
Francisco J. García)
Ni Papa Noel ni los Reyes Magos han
dejado regalo alguno. El Villa del Río C.F. inicia la segunda vuelta
de la competición, de la misma manera como la terminó, con una
derrota. No es cuestión de buscar excusas, pero un simple vistazo a
la convocatoria realizada por el técnico Roger para este partido
dejaba entrever el sin fin de bajas con la que el equipo acudía a
tierras aceiteras. Hasta nueve jugadores se encontraban de baja, por
lo que hubo que incluso recurrir a un juvenil Pedrito Sanroque para
completar la citación. Y es que entre sancionados (Yedres, Elena y
Prieto), lesionados (Sergio Muñoz, Jesús, Villatoro y José Robles)
y enfermos (Ángel y Pedro Jesús), la formación inicial villarrense
era absolutamente de circunstancias.
Enfrente un rival el Baenense que
trataba de poner tierra de por medio con respecto a las plazas de
descenso. Y que por tanto era consciente que los partidos de casa son
vitales para conseguir su objetivo. Encima era consciente que rivales
directos como el Cerro Muriano y el Almedinilla le estaban metiendo
presión.
Pero el Villa del Río entra al
partido con las ideas muy claras, tocando el balón y buscando las
habituales triangulaciones. Sergio Robles y José Luís ensanchan el
campo al máximo y no se había llegado al minuto dos cuando Majuelos
estrellaba en el larguero un balón desde la frontal del área. Unos
muy buenos minutos villarrenses que no solo controlaban al rival sino
que hacían olvidar a los ausentes.
Pero inesperadamente en un abrir y
cerrar de ojos, todo se fue al traste. En la primera aproximación
local al área rival, Bibi saca una falta al corazón del área,
Álvarez entre una nube de jugadores remata de cabeza muy vertical,
el balón llovido desde el cielo no es despejado con contundencia por
Pedro Torralba, quizás molestado por algún propio compañero y el
balón queda a la merced del central Mesa que no desaprovecha la
ocasión. Los locales se adelantaban en el marcador y en su primer
remate a puerta. El Villa del Río acusa el golpe tanto, que medio
minuto después encaja el segundo gol. Tras un nuevo saque de falta
de Bibi, el balón llega a Pipa que aprovecha la alarmante pasividad
defensiva de Rubio para regatearlo con comodidad y marcar rematando
al palo largo. Increíble, dos goles en contra en apenas dos minutos
y lo que es peor en dos inexplicables concesiones defensivas. Con el
equipo absolutamente desquiciado y mentalmente fuera del partido y
como se suele decir que no hay dos sin tres. En el minuto 22, un mal
control de Cristian en defensa deja el balón a los pies de Álex que
mete la directa hacía la portería villarrense. Salva llega tarde al
cruce y lo derriba en la frontal. La falta y la tarjeta roja no
admiten discusión alguna y el Villa del Río se ve obligado a jugar
casi una hora de partido en inferioridad numérica. Roger muy
descontento con lo que ve, realiza dos sorprendentes cambios pasada
la media hora de juego y retira a Rubio y Luís por Soriano y Germán.
El tercer gol local obra de nuevo de Pipa al recibir un pase en
profundidad pone el partido imposible. Pero a poco del descanso un
saque lateral de falta de Majuelos acaba en la red, mucha culpa la
tuvo el cruce de Antonio Muñoz en la trayectoria del balón que pudo
despistar a defensores y portero.
En la segunda parte el Villa del Río
sale consciente que otro gol le metería de lleno en el partido y
haría aflorar las dudas en el cuadro local. Y pudo llegar bien
pronto, pero el corner muy cerrado de Antonio Muñoz, se estrellaría
en el larguero (min. 48). El riesgo era máximo y con la defensa en
la línea de medio campo se trata de encerrar al cuadro local. Pero
esta presión y esta mayor posesión de balón no se traduce en
jugadas de peligro. Encima los asistentes no colaboran y se equivocan
al señalar algún inexplicable fuera de juego, sobre todo un par de
ellos a José Luís que desde la grada no parecieron en ningún
momento. Curiosamente uno de los asistentes Ramírez Jurado es hijo
del exarbitro cordobés de Primera División Rafael Ramírez
Domínguez. La insistencia villarrense encontraría su premio
demasiado tarde y a siete del final Majuelos aprovecha un balón
suelto en el área para hacer un esperanzador tres a dos. El resto
del partido iba a ser una lucha titánica contra el reloj y contra un
cuadro local atrincherado en su área. Y la sentencia local llegaría
en el minuto noventa y curiosamente tras otro ingenuo fallo
villarrense. Con todo el equipo metido en el área contraria, Germán
saca una falta lateral demasiado corta que se estrella en la barrera
local, la contra mortífera del juvenil Hilario acaba ante Marcial y
regala el gol a Pipa para que marque a puerta vacía. Era la
sentencia definitiva para un Villa del Río voluntarioso pero
demasiado fallón en momentos puntuales. Tras este resultado adverso
el equipo cae hasta la quinta plaza clasificatoria justo por detrás
del Recreativo Belmezano, el rival que visitará el próximo domingo
día 19 de Enero, el Polideportivo Municipal (17 horas). Esperemos
que para entonces el capítulo de bajas se vea considerablemente
reducido dada la importancia del partido.