El meta carpeño Castro estuvo excepcional y mantuvo a su equipo en el partido.
VILLA DEL RÍO C.F. 2 EL CARPIO C.F. 1
Villa del Río- Juanlu, Darío, Soto, Tena, Rafa Llamas, Cris, Cristian, Paco, Luís Elena, Dani Frías y Mario Rodríguez. También jugaron: Hugo y Manuel.
El Carpio- Castro, Rodri, Manu Mariscal, Nico, Agustín, Raúl, Montero, Paco Solís, Ibra, Kiko Pastor y Fran Ruiz. También jugaron: José Carlos, Juan Ruiz, Abid y Alberto.
Árbitro- Rafael Muñoz Martín. Estuvo auxiliado en las bandas por Huertas Cabrera y Marcos Casillas. Amonestó a los locales Tena, Luís Elena, Darío y Soto y a los visitantes Paco Solís, Nico y Narváez (banquillo). Expulsó por doble tarjeta amarilla al visitante Manu Mariscal (min. 81).
Goles- 1-0 (min. 19) Dani Frías 2-0 (min. 21) Dani Frías 2-1 (min. 45+1) Montero.
Incidencias- Unos trescientos espectadores, se dieron cita en los graderíos del Polideportivo Municipal de Villa del Río, entre ellos una nutrida representación de aficionados llegados desde tierras carpeñas. El Carpio C.F, para evitar coincidencia de colores, vistió con su segunda equipación, totalmente de azul. El Villa del Río C.F. en el tradicional posado del equipo, antes del comienzo del partido, mostró una bandera de Ucrania, en solidaridad con aquel país europeo.
Comentario- Francisco J. García.
Fotografía- Mari Canales Jurado
No defraudó en absoluto el duelo de rivalidad comarcal que enfrentó a villarrenses y carpeños en este vigésimo cuarto capítulo liguero. Un partido que tuvo como protagonista al meta visitante José Manuel Castro Cabello, que con sus acertadas y reiteradas intervenciones, no solo evitó que su equipo encajara una abultada goleada, sino que consiguió que los suyos llegaran al epílogo con esperanzas de haber podido puntuar.
El portero carpeño Castro estuvo sencillamente sensacional.
Tras tres derrotas consecutivas, el Villa del Río C.F. salió con una intensidad fuera de lo común, presionando muy arriba, corriendo mucho y jugando el balón con bastante criterio. No es de extrañar que con el paso de los minutos, empezaran a generar ocasiones sobre la portería carpeña. En el minuto ocho comenzó el recital de Castro en la portería visitante. Primero al detener un remate a bocajarro de Luís Elena, tras asistencia de Soto. Tres minutos después, detendría un lanzamiento de penalti de Darío tras un derribo de Montero a Soto en el área.
El acoso local era continuo ante un conjunto visitante impotente de sacudirse ese dominio. Castro volvería a desesperar a los jugadores locales, con una doble parada, tras remates consecutivos de Luís Elena y Dani Frías. Y un minuto después, una jugada personal de Soto acaba con un disparo con su pierna mala, la derecha, que se va fuera por muy poco.
Dani Frías, perseguido por Rodri, fue el autor de los goles villarrenses.
Pero claro, tanto va el cántaro a la fuente, que al final se rompe. Y en apenas dos minutos (19 y 21) dos remates de Dani Frías acabaron con el balón en el fondo de la portería. El primero de goleador nato, tras ganarle la posición a Nico en un balón en largo y el segundo, tras una brillante jugada personal, culminada con un preciso tiro.
El técnico visitante intenta hacer reaccionar a su equipo y José Carlos y Juan Ruiz entran al campo, sustituyendo a Nico e Ibra. Precisamente Juan Ruiz ejecuta el primer remate de su equipo entre los tres palos, con un remate a la media vuelta, que obligó a intervenir a Juanlu con apuros.
Pero el partido seguía teniendo un claro protagonista y no era otro que Castro, que en los minutos 43 y 45 demostró unos magníficos reflejos para detener un disparo envenenado de Cristian y el rechace de Luís Elena, y posteriormente un remate cercano de Paco.
Y lo que es el fútbol, una primer parte plácida de un superior Villa del Río termina de la peor manera posible, ya que en el añadido, un balón largo a la espalda de la defensa, Soto duda, no despeja y se complica la existencia, dejando un balón franco a Montero que no desaprovecha ante la media salida de Juanlu.
De la goleada local se pasaba a un marcador escueto y que daba paso a un segundo periodo, en el que el Villa del Río C.F. salió a sentenciar el partido. Pero no era el día. Al primer minuto de la reanudación, un lanzamiento de falta de Darío acaba con el balón impactando con violencia en el larguero. Y cinco minutos después, sería el poste, quien rechazara un balón rematado por Luís Elena.
Soto y Montero tuvieron un intenso duelo durante el partido.
Con el paso de los minutos, el partido se abre por completo. Bien es cierto, que los locales eran los que creaban mayor peligro ante un rival, que buscaba tener el balón, pero al que le costaba superar una ordenada y concentrada línea defensiva rojilla.
Castro sigue a lo suyo y en el minuto sesenta y tres vuela hacía la escuadra para desviar a córner un balón rematado por Darío con un zurdazo parabólico. La afición local se desesperaba por la falta de acierto de los suyos en la definición o por el acertado trabajo del meta rival.
Luís Elena, en el minuto sesenta y seis, se encuentra con un balón en el corazón del área, pero sólo ante Castro, remató muy fácil para el portero.
Luís Elena trata de escapar del marcaje de Agustín.
El reloj avanzaba inflexible su marcha y la mínima diferencia en el marcador dejaba mucha incertidumbre. Bien es cierto que las llegadas de El Carpio no eran muy claras, pero llegaba y ya se sabe que en cualquier momento podía llegar la desaplicación, el error y el gol del rival.
El partido se vuelve muy exigente en lo físico, con dos equipos trabajando a destajo, para evitar el juego del rival. Una arrancada por velocidad de Dani Frías es cortada en falta por Manu Mariscal, lo que le supone su segunda tarjeta amarilla y la consiguiente expulsión. Ni con un jugador menos sobre el campo, los carpeños cejaron en su empeño de buscar la igualada.
Manu Mariscal, en la imagen perseguido por Cristian, fue expulsado por doble tarjeta amarilla.
Las jugadas a balón parado comienzan a tener su peso en oro. Y en el minuto ochenta y cinco, tras un corner botado por Cris al segundo palo, Dani Frías remata con precisión, pero Castro vuelve a demostrar que no estaba por la labor de encajar más goles en el partido.
El descuento fue agónico, con El Carpio colgando balones al área en la búsqueda desesperada del gol y un Villa del Río que a diferencia del anterior partido en Castro del Río, si mostró actitud en la marca y estuvo contundente y expeditivo.
Manuel se echa al suelo para evitar el pase en largo de Nico.
El pitido final supuso todo un alivio para la afición local, deseosa de que su equipo cortara esa racha de derrotas que le estaba condicionando y que le permitiera sumar tres nuevos puntos, que le acerquen a su objetivo de la salvación. Con ese mismo objetivo tendrá que seguir trabajando el cuadro carpeño, al que sus incondicionales despidieron con aplausos por la entrega y el compromiso mostrados. El próximo domingo recibirán en su estadio a la Peña de Los Leones del Ath. de Bilbao de Pozoblanco. Por su parte el Villa del Río, tendrá un duro hueso por delante, ya que viajará hasta el Estadio Municipal de La Peña del Águila de Almodóvar del Río, donde le espera el líder intratable del grupo, el Almodóvar del Río C.F.