lunes, 27 de mayo de 2024

El Villa del Río F.S. se proclama campeón de la Copa Diputación.

FÚTBOL-SALA: Crónica del partido de vuelta de la semifinal de la Copa Diputación de la Segunda Andaluza Senior de Córdoba. Temporada 2023/2024.

 

El Apaga y Vámonos vencía por un gol a tres, en el tiempo de descanso.

 

 


La explosión de júbilo fue tremenda tras recibir el trofeo de campeón. 


VILLA DEL RÍO F.S.  6  APAGA Y VÁMONOS C.D.  3 


Villa del Río- Iván Marín, Flores, Ávila, Paco Camargo y Johnny. También jugaron: Pedro Torralba (p.s.), Pelusa, Pablo, David Rivilla, Zapa, Tolillo y Cubero.

Apaga y Vámonos- Javier Córdoba, Marañón, Tamajón, Fernando y Cubero. También jugaron: Jesús Luna (p.s.), Tetur, Isaac, Polo y Víctor.

Árbitros- José Carlos Malagón Leña y Candela Aguayo Pérez. Estuvieron asistidos en la mesa por Pablo Ortiz Cobacho. Amonestaron al local Tolillo y a los visitantes Tetur, Isaac y Polo.

Goles- 1-0 (min. 2) Paco Camargo  1-1 (min. 10) Fernando  1-2 (min. 19) Polo  1-3 (min. 19) Polo  2-3 (min. 21) Pelusa  3-3 (min. 22) Ávila  4-3 (min. 25) Paco Camargo  5-3 (min. 26) Zapa  6-3 (min. 30) Paco Camargo.

Incidencias- Lleno absoluto en el Pabellón Municipal Matías Prats de Villa del Río, con los graderíos y los pasillos absolutamente colapsados. Así que una cifra cercana al millar de espectadores, entre ellos un centenar de aficionados llegados desde Doña Mencía, asistieron al partido. La charanga "La Penúltima", con sus sones, volvió a poner música ambiental al partido.

A la conclusión del mismo, el Presidente Delegado de la F.A.F. en Córdoba, Martín Torralbo Luque junto con el alcalde de Villa del Río, Jesús Morales Molina, hicieron entrega de los trofeos conmemorativos de subcampeón y campeón respectivamente.

 

 

Comentario - Francisco J. García

Fotos- Andrés Gaitán Fotografía

 

Punto final a una temporada de ensueño. En su segundo año de vida, tras su refundación, el Villa del Río F.S. ha hecho historia tras hacerse con el doblete, campeón de liga y copa, en el fútbol sala senior de la provincia de Córdoba.

El título liguero llegó hace ya varias semanas tras ser el claro dominador en una competición en la que sus dos únicas derrotas llegaron, tras haber entonado el ansiado alirón. Pero quedaba la asignatura pendiente, la Copa Diputación. Aquel título que se les escapó de las manos la pasada temporada, en aquella final de Carcabuey, en una fatídica tanda de penaltis, donde llegaron incluso a disponer de un lanzamiento para adjudicarse tan preciado galardón. Pero entonces no pudo ser, aunque recibieron el cariño y el reconocimiento del centenar y medio de aficionados rojillos que se desplazaron a tierras de la Subbética cordobesa.


La afición ha sido un pilar fundamental en los éxitos logrados por el equipo.


En esta oportunidad, partían como claros favoritos, primero porque su superioridad ante el resto de rivales, en el presente ejercicio, había quedado claramente manifiesta y segundo, porque ejercían de anfitriones en la gran final. En su renovado pabellón y ante su público, parecía casi imposible, que el Villa del Río F.S. dejará escapar su deseado trofeo.

Pero enfrente estaba otro gran equipo, curiosamente su más directo rival en la competición liguera y que quedó tan solo un escalón por debajo en la clasificación final de la misma. El Apaga y Vámonos C.D. de Doña Mencía se presentó a la cita consciente que tenía mucho que ganar y muy poco que perder. Arropados por un centenar de valientes aficionados que hicieron en autobús y numerosos coches particulares, los ochenta kilómetros que separan ambas poblaciones, fueron un dignísimo rival. Un equipo que llegó a dejar helado momentáneamente, pese a la elevada temperatura ambiental, el Pabellón Matías Prats cuando en el descanso de la gran final, llevaban una cómoda renta a favor en el marcador de un gol a tres.

Paco Camargo intenta superar el acoso de dos contrarios.


Pero si algo engrandece a este deporte llamado fútbol sala, es la  impredecibilidad del mismo, donde todo cambia en apenas unos minutos y unos minutos son una eternidad.

El partido arranca con dos equipos muy enchufados y que demuestran su ambición, al ejercer una presión sobre el rival muy arriba, buscando robar el balón en zonas de peligro. Y sin apenas haber roto a sudar, los locales tomaron ventaja en el marcador, gracias a un punterazo de Paco Camargo, que sorprendió a Javier Córdoba junto a la base de su poste derecho.

La final parecía ponérsela de cara a los pupilos de Pedro Antonio Toribio, pero dicha superioridad en el marcador, distaba mucho de lo que se veía en la pista, donde los mencianos seguían a lo suyo, dando trazas de equipo grande ya que ni la tremenda presión ambiental ni la jerarquía del rival, parecían pasarles factura.

Fernando, en el minuto diez, iguala la contienda con un potente chut que supera a Iván Marín, la jugada vino precedida de un mal pase de los locales y el posterior robo de balón.

Las tablas en el marcador, afectan a la moral de los locales, que parecían acusar la presión. Su juego carecía de la intensidad y la precisión habituales y pese a los continuos relevos efectuados desde su banquillo, esa mejoría no llegaba.

Pablo Velasco intenta superar el marcaje del observado Cubero.


Mientras tanto el Apaga y Vámonos C.D. seguía a lo suyo, firmes en defensa, con buena circulación de balón y donde destacaba por cierto el joven Cubero. Un jugador en edad cadete o juvenil, nos queda esa duda, que no desentonaba lo más mínimo jugando con y contra seniors. No es de extrañar por tanto, que por el palco de autoridades hubiera más de un entrenador, con Lolo Vinos, preparador del filial del Córdoba Patrimonio de la Humanidad, en la Segunda División B del fútbol sala nacional.

Precisamente una escapada en velocidad de Cubero acaba con una perfecta asistencia para que su compañero Polo le diera la vuelta al marcador. Y sin apenas para digerir el golpe recibido, de nuevo Polo, con un derechazo centrado, en el que el balón pudo rozar en la pierna de Flores para despistar a Iván Marín, sitúa el uno a tres en el marcador a pocos segundos del descanso.

Saltaba la sorpresa en el recinto deportivo que lleva el nombre del mítico periodista villarrense y los mencianos estaban haciendo añicos el previsible argumento de la gran final.

Fran Ávila y Javier Córdoba en un mano a mano. El meta salió airoso.


Sin embargo, en el paso por vestuarios, la charla del técnico local Pedro Antonio Toribio, debió ser tan explícita como motivadora, ya que su equipo salta a la pista en el segundo periodo con un talante diametralmente opuesto.

Los veteranos comienzan a tirar del carro y tienen la suerte de encontrar un gol tempranero, que supone una enorme inyección de moral. Y es que a los veintitantos segundos de la reanudación, el carpeño Pelusa supera al recién entrado Jesús Luna.

El dos a tres despierta a la afición local, que apoyados en la música de la charanga, empieza a empujar a los suyos. Y al minuto siguiente, en una contra local, la definición de Ávila es perfecta y supera por el palo corto al meta rival. No se había llegado al minuto dos, de este segundo acto y los rojillos habían restablecido las tablas en el marcador.

Este cambio radical en el desarrollo del juego, provoca un enorme efecto psicológico en  ambos equipos. Los locales recuperan las sensaciones de siempre, mientras que los visitantes les asaltan las dudas.

El éxtasis llega al Pabellón Matías Prats con el cuarto gol local, obra de Paco Camargo, pero medio gol fue el robo, la conducción y la asistencia de Fernando Cubero.

Pedro Torralba abraza a Paco Camargo. Las paradas de uno y los goles del otro, decisivos.


El cambio de actitud de los locales estaba ejerciendo como el revulsivo deseado, pero hubo otro factor absolutamente determinante y no fue otro, que la presencia de Pedro Torralba en la portería local. El guardameta estuvo sensacional y echó el cierre a la meta local, terminando por aburrir a los jugadores contrarios que veían impotentes como con sus manos, con sus pies o con su cuerpo rechazaba todos los balones que iban directos a su portería.

Precisamente Pedro Torralba fue partícipe en el quinto gol local, ya que un efectivo y preciso saque de puerta en largo, sobre el desmarque de su compañero Zapa, permite al jugador de Lopera, superar con una preciosa vaselina la salida de Jesús Luna.

La celebración del jugador desencadenó la locura en la afición local, que ahora sí veía el título más cerca, aunque el problema es que quedaba un mundo, nada más y nada menos que catorce minutos de juego por delante.

Por lo que nadie se fiaba lo más mínimo, los mencianos seguían a lo suyo jugando con mucho criterio y finalizando las jugadas al más mínimo intento. Pero el meta local parecía tener un imán en sus manos y todos los balones eran rechazados. Ni desde lejos, ni desde cerca, ni por arriba, ni por abajo, había manera de hacer ese gol que revirtiera un tanto la situación.

Y buena prueba de ello, es que las rotaciones en los locales, impuestas desde su propio banquillo, ya fueron más reducidas en este segundo acto. Como si quisieran apoyar el peso de la final en sus jugadores más veteranos y expertos.

Y claro a la contra, con espacio por delante tras robo, los locales estaban como pez en el agua. Y para dinamitar cualquier atisbo de duda, Paco Camargo en el minuto treinta pone el set (6-3) en el marcador, que allana aún más el camino.

Pero, ni el clarificador marcador en contra, ni el inflexible avance del cronómetro, hacen que los mencianos bajen su ritmo competitivo. Y con poco menos de cinco minutos en juego, desde su banquillo se decide jugar con portero jugador. Aunque ni las ideas ni la movilidad ni la precisión en el pase, eran ya las precisas para superar a una defensa local que basculaba para cerrar tanto los posibles disparos, como las líneas de pase. Además, Pedro Torralba seguía en estado de gracia, rechazando cuantos balones llegaban a su marco.

El marcador ya no se movería más y pocos segundos antes del final, aparecieron los gritos de ¡campeones, campeones, oe, oe, oe!  en los graderíos del pabellón villarrense. El pitido final del marcador electrónico desató la euforia en los locales que celebraron con euforia el título. Mientras que los aficionados visitantes, reconocían y sabían premiar con una enorme ovación, el esfuerzo de sus jugadores.

Instantánea de la entrega de trofeos, con la presencia de las autoridades locales y federativas.

Foto: Facebook Ayuntamiento de Villa del Río.


La celebración se prolongó posteriormente con una rúa por las calles de la localidad, que terminó con la visita institucional al Ayuntamiento de Villa del Río, donde jugadores, cuerpo técnico y directivos, fueron recibidos por las autoridades locales.

Y como fin de fiesta estuvo la velada que el propio club, organizó en la Plaza de la Constitución, con el lógico permiso del consistorio, donde instaló una barra, que agotó existencias, mientras un Dj amenazaba una velada que se prolongó hasta altas horas de la noche. Y es que una temporada tan histórica tenía que tener como punto final, ese más que merecido agasajo.

lunes, 20 de mayo de 2024

El Villa del Río F.S. disputará la finalísima de la Copa Diputación.

FÚTBOL-SALA: Crónica del partido de vuelta de la semifinal de la Copa Diputación de la Segunda Andaluza Senior de Córdoba. Temporada 2023/2024.

 

Fue muy superior y volvió a golear al Santaella 2010 C.D.

 


Los jugadores celebran con los aficionados el pase a la final. 

 

VILLA DEL RÍO F.S.  6  SANTAELLA 2010 C.D.  1 


Villa del Río- Iván Marín, Flores, Ávila, Paco Camargo y Johnny. También jugaron: Perola (p.s.), Tolillo, David Rivilla, Zapa, Pelusa, Cubero y Raúl.

Santaella 2010- Miguel Ángel, Kiko, Monchi, Álvaro e Ismael. También jugaron: Grego (p.s.), Cano, Pichita, Chani, Bojan y Gonzalo.

Árbitros- Manuel Jesús Barrilero Mohedano y Rubén Sánchez Portero. Estuvieron asistidos en la mesa por Juan Emilio González Carmona. Amonestaron a los locales Zapa y Johnny.

Goles- 1-0 (min. 10) Johnny  2-0 (min. 16) Zapa  3-0 (min. 21) Raúl  4-0 (min. 22) Ávila  4-1 (min. 35) Bojan  5-1 (min. 36) Tolillo  6-1 (min. 37) Tolillo.

Incidencias- Unos 400 espectadores se dieron cita en los graderíos del Pabellón Municipal Matías Prats de Villa del Río. La charanga "La Penúltima", con sus sones, se encargó, como es habitual de poner música ambiental al partido.

 

 

Comentario - Francisco J. García

Fotos- Andrés Gaitán Fotografía

 

Tal y como ocurriera en la pasada temporada, el Villa del Río F.S. volverá a disputar la gran final de la Copa Diputación Provincial de Córdoba, en categoría senior. En aquel entonces, lo tuvo todo en su contra, ya que el partido se disputó en la localidad cordobesa de Carcabuey, donde le esperaba su rival el Carcabuey F.S. que unas semanas antes se había proclamado campeón de liga.

Por aquel entonces, tan solo una fatídica tanda de penaltis privó a los villarrenses de la obtención de su primer título tras la refundación del club en esa misma temporada.

Fran Ávila intenta deshacerse de la marca de Bojan.


En esta oportunidad, el destino le otorga la condición de favorito ya que curiosamente ejercerá de anfitrión en el partido decisivo por el título y como vigente campeón de liga de esta Segunda Andaluza Senior de Fútbol Sala.

Enfrente estará el Ápaga y Vámonos C.D. de Doña Mencía, vigente subcampeón liguero y con el que mantiene una sana rivalidad deportiva, en estas dos últimas campañas. Los mencianos superaron en la semifinal al Beconet Bujalance B, no con cierto sufrimiento, ya que los bujalanceños llegaron con opciones de clasificación a los últimos minutos del partido de vuelta.

Paco Camargo fue decisivo en el partido de ida, al anotar tres de los goles de su equipo.


Antes el Villa del Río F.S. se había deshecho sin ningún tipo de problema de su rival en semifinales, el C.D. Santaella 2010 al que superó en los dos partidos (3-6) y (6-1).

La cita de vuelta, apenas otorgó tiempo para la posible sorpresa, ya que a los diez minutos el capitán local Johnny, tras asistencia de Cubero, ya había puesto por delante a su equipo y elevado a cuatro, los goles de renta en la eliminatoria.

Aún así, los santaellenses se olvidaron de resultados presentes y pasados y siguieron compitiendo, realizando un partido muy serio.

Pelusa y Zapa se abrazan para celebrar el segundo gol local.


Curiosamente de una falta favorable a los visitantes sumamente peligrosa para el marco defendido por Iván Marín, nació el segundo gol local. Una contra letal llevada por el carpeño Pelusa fue culminada por el loperano Zapa, que en su debut con la camiseta rojilla, volvió a demostrar que los goleadores nunca pierden su olfato, ni cambiando de equipo.

El segundo gol local fue el detonante para que el C.D. Santaella 2010 realizara probaturas tácticas y a falta de tres minutos cuarenta para el descanso, su técnico Rafael Aguilera introdujo de manera continuada el portero jugador, con lo que el juego de cinco azulillo se perpetuó en el resto del envite.

El loperano Zapa encara al meta visitante Miguel Ángel.


Cualquier duda que pudiera haber en torno al desenlace del envite quedó erradicada al inicio del segundo periodo ya que en apenas unos segundos, el Villa del Río F.S. elevó a cuatro su ventaja en el marcador, tras los goles del juvenil Raúl Criado, en una posición forzada, y de Fran Ávila desde cerca tras buscar el primer palo.

Ni con un marcador tan adverso, cambiaron su táctica los visitantes que siguieron de manera continuada con el juego de cinco, como si quisieran trabajar el mismo pensando en la próxima temporada. Y es que pese a su insistencia, les costaba superar la basculante defensa local que intentaba sacrificarse en defensa para tapar todos los ángulos de remate y todas las líneas de pase.

David Rivilla ha reforzado al equipo de su pueblo para la Copa Diputación.


Al final lograron su objetivo y a cinco minutos del final, el visitante Bojan hacía el llamado gol del honor de su equipo al rematar en las inmediaciones del territorio de Perolas, una asistencia de un compañero.

Pero los rojillos respondieron de inmediato al tanto visitante y un robo de balón, permite a otro debutante, el montoreño Tolillo, marcar a puerta vacía y subir el cinco, al marcador local. Y para culminar el festival villarrense, repetiría de nuevo Tolillo, a tres del final, tras una enorme asistencia de Johnny que se corrió la pista, como si el partido no hubiera hecho nada más que comenzar.

Zapa y Pelusa, velocidad y pegada para la vanguardia villarrense.


En resumen justa y merecida victoria de un Villa del Río F.S. que vuelve a disputar la final de la Copa Diputación Senior. Será el próximo sábado día 25 de mayo de 2024 a las 18 horas en el Pabellón Matías Prats de Villa del Río. Su rival será el C.D. Apaga y Vámonos de Doña Mencía, un equipo que siempre ha sabido plantar cara a los villarrenses en sus últimos cuatro enfrentamientos ligueros.

Tres jugadores rojillos celebran uno de sus goles. Esperemos que esta imagen se repita el próximo sábado.

EL VILLA DEL RÍO C.F. DA LA CARA Y CAE CON DIGNIDAD EN PEÑARROYA.

Crónica partido vuelta semifinales Play Off de ascenso en la Primera Andaluza de Córdoba. Temporada 2023/2024.

 

Los villarrenses llegaron a voltear la eliminatoria, pero los locales reaccionaron.


Dani Frías y Fran Soriano arrebatan el balón a Hidalgo 


PEÑARROYA C.F.  2  VILLA DEL RÍO C.F.  2   

 

Peñarroya- Molero, Mario González, Pedro Gallego, Antonio Carlos, Hidalgo, Gorka, Felipe, Miguelillo, Ignacio, Alvarito y Tate. También jugaron: Alberto Gallego, Durán, Mario García y Carlos Rueda.


Villa del Río- Coke, Rodri, Fran Soriano, Dani Frías, Durán, Hugo, Paquito, Tena, Javi Guerrero, Iván Román y Juampe. También jugaron: Juanjo, Marcos, Mario, Juan Carlos y Madueño.


Árbitro- Aharón Hervás Fernández. Estuvo asistido en las bandas por Aitor Hervás Fernández y Pedro Buenestado Calle. Como cuarto árbitro estuvo Fernando Alba Jiménez. Amonestó a los locales Hidalgo, Alvaro, Tate y Carlos Rueda y a los visitantes Tena, Hugo, Paquito y a Antonio Muñoz, preparador físico. Expulsó con tarjeta roja directa al local Miguelillo (min. 43) y al visitante Mario (min. 84) y por doble tarjeta amarilla al visitante Javi Guerrero (min. 72) y a su entrenador Fran Elena (min. 82).

Goles-  0-1 (min. 12) Durán  0-2 (min. 21) Tena  1-2 (min. 62) Tate  2-2 (min. 92) Carlos Rueda

Incidencias- Unas ochocientas personas llenaron los graderíos del Estadio Municipal "Casasblancas" de Peñarroya. Entre ellos un centenar de valientes aficionados villarrenses llegados desde el Alto Guadalquivir, recorrieron en el autobús fletado por el club y en numerosos coches particulares, los ciento treinta kilómetros de distancia, que separan ambas localidades. En los minutos treinta y setenta y cinco de partido, se hicieron sendas pausas para la hidratación de los jugadores. Como representante de la Federación Andaluza de Fútbol en Córdoba, estuvo presente Pedro Benítez Lara, delegado del C.T.A en nuestra provincia.


Antes del inicio del partido, los dos equipos hicieron el pasillo de honor a los jugadores y cuerpo técnico de los equipos filial y juvenil de la entidad peñarriblense por sus ascensos de categoría.

 

Comentario y fotografías- Francisco J. García.

 

El Peñarroya Pueblonuevo C.F. disputará el próximo domingo día 26 de mayo, la gran final del play off de la Primera Andaluza de Córdoba, tras deshacerse, con más sufrimiento del inicialmente previsto, de un Villa del Río C.F. que supo competir y dar la cara, pese a que tenía la eliminatoria muy cuesta arriba.

Su rival será el Atco. Palma del Río, al que su liderazgo en la fase regular de la competición le otorgó el pase, tras terminar empatada su eliminatoria de semifinales ante el C.D. Egabrense.

Álvaro y Paquito volvieron a mantener un intenso duelo.


No es de extrañar por tanto, que el centenar de aficionados villarrenses desplazados a la localidad de El Peñón, despidieran a sus jugadores con una sentida ovación y con gritos de apoyo moral. El sentir generalizado es que el equipo había caído con dignidad, tras realizar un partido muy serio, llegando incluso a voltear la eliminatoria de manera momentánea. Pero finalmente no pudieron mantener su renta y el partido acabó en empate.

La cita arranca de manera sorpresiva, con un conjunto visitante muy metido en el partido, consciente que el pase a la final estaba muy complicado, pero que al menos había que intentarlo. Así el Villa del Río C.F. aparece dando su mejor imagen, como disfrutando de esa semifinal de play off que se habían ganado con todo merecimiento. Bajo la batuta de Juampe, tratan de jugar en campo contrario, echando el balón al suelo y buscando ambas bandas donde Paquito y Dani Frías trataban de ensanchar el campo. Mientras tanto los locales se veían sorprendidos por esa ambición de su rival y también parecían verse maniatados por la responsabilidad.

Antonio Carlos juega el balón con su cabeza ante la mirada de Dani Frías, Hugo y Paquito.


El primer gol visitante obra de Durán, tras cabecear un centro preciso de Juampe, que previamente había robado un balón en la línea de medios del rival, agudizó aún más, esta presión. Y sin apenas tiempo para digerir el gol encajado, la eliminatoria cambia inesperadamente de signo. Fernando Tena mete un balón al área, pasando entre una nube de atacantes y defensores, sin que nadie sea capaz de golpear el mismo. Finalmente acaba entrando en la portería de un sorprendido Molero. El reloj decía que se habían superado en poco los veinte minutos de juego y el Villa del Río parecía haber hecho lo más difícil. Pero el problema es que quedaba más de una hora de juego por delante y los aficionados locales se volcaron con los suyos, en el intento de buscar una reacción que parecía no producirse.

Pedro Gallego despeja el balón ante la llegada de Durán.


Y es que los peñarriblenses eran un auténtico manojo de nervios, algo que se traducía en imprecisiones continuas, tanto a la hora de controlar el balón, ejecutar un pase o iniciar una conducción. Aún así, aunque fuera más con el corazón que con la cabeza, llevaron algún peligro sobre la portería de Coke, pero los remates de Felipe (min. 31) e Hidalgo (min. 42) se fueron fuera.

Claro que para pérdida de cabeza, la que tuvo el local Miguelillo, que en una jugada intrascendente que acaba en un saque de banda a su favor, acaba agrediendo a Rodri. La tarjeta roja no admite discusión alguna y deja a su equipo con un panorama desolador. Con una eliminatoria remontada, con resultado adverso y en inferioridad numérica.

Fran Soriano e Hidalgo disputan un balón aéreo.

 

Pero curiosamente tras el descanso cambia por completo la decoración. El Peñarroya Pueblonuevo C.F. salta al terreno de juego, con otra predisposición y se deja los nervios en la caseta. Comienzan a apretar y a jugar balones en largo a la espalda de los defensores contrarios. Allí estaba un Felipe Veloso, que tanto por arriba, como por abajo, sabe ganar todos los balones. Y hablando de balones, la posesión cambia y los locales comienzan a hacer el juego que les interesaba.

Fernando Tena e Iván Román celebran el segundo gol de su equipo.


Todo este giro en el argumento del partido, llega porque los villarrenses, tal y como ocurriera en sus citas precedentes, vuelven a sufrir un bajón físico. El trabajo de presión y desgaste sobre los contrarios ya no es el mismo. Ni en intensidad ni en efectividad. Los balones divididos son todos de color rojillo, el del Peñarroya Pueblonuevo C.F.

Precisamente en una acción donde se pudo comprobar la falta de contundencia defensiva en un balón disputado, llegaría el primer gol local. Pérdida, contraataque, asistencia de tacón y Tate, que fusila a Coke. Este gol daba de nuevo un giro radical a la eliminatoria, ya que con ese (1-2) eran los mineros los que se clasificaban para la final, por haber quedado en una mejor posición en la liga regular.

Antonio Carlos y Tate se estorban mutuamente al tratar de rematar un balón aéreo.


Quedaba media hora de juego por delante, pero el panorama estaba complicado para los visitantes, que habían perdido mucha presencia en el campo rival y la portería de Molero, parecía estar más lejos.

La lesión de Tena supone otro inesperado bache en el camino, por su experiencia y su control en la defensa villarrense. Juanjo le sustituye y posteriormente entran al juego, Marcos y Mario para intentar recuperar un centro del campo que se había perdido.

En el minuto sesenta y seis le sería anulado un gol al Villa del Río C.F. obra de Iván Román, por un fuera de juego, que desde la grada pareció ser así. El arbitraje en esta fase de partido estaba presionado al máximo. Y es que desde la expulsión del jugador local en el epílogo del primer periodo, cualquier falta de los visitantes, se pedía de inmediato, tanto desde dentro como desde fuera del terreno de juego, la pertinente amonestación, con independencia de la vulnerabilidad de la misma.

Felipe Veloso no marcó en esta oportunidad, pero fue decisivo en el juego de su equipo.


Y claro, al final tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe. Y Javi Guerrero en el minuto setenta y dos, recibe una rigurosa segunda tarjeta amarilla, que le obliga a abandonar el terreno de juego. La presión desde el graderío, las quejas de los jugadores, la caída de Felipe…. provocaron el efecto deseado.

El partido se equilibraba en cuanto al número de efectivos por bando, pero en lo referente al desarrollo del juego se abría un abismo aún mayor, teniendo en cuenta la importancia del jugador expulsado en el sistema de juego de su equipo.

Ignacio en el minuto setenta y ocho tuvo en su cabeza el gol, pero su remate centrado acabó en las manos de Coke.

La entrada del veterano Juan Carlos sustituyendo a un Paquito, que estuvo más afinado en el primer que en el segundo periodo y la del capitán Madueño, que tuvo que olvidar sus dolencias y echar una mano, fueron las postreras armas que utilizaron "Los Franes" para tratar de buscar ese milagroso gol que volviera a darles el pase a la final.

Dani Frías despeja el balón ante la llegada de Gorka.


Pero lógicamente, al echarse tácticamente arriba de manera desesperada, conllevaba asumir riesgos defensivos. El Peñarroya Pueblonuevo C.F. se mostraba firme en defensa y apenas concedía algunos centros laterales, donde por arriba no tenían problema a la hora de imponer su jerarquía con jugadores como Antonio Carlos y Pedro Gallego.

Los visitantes dicen prácticamente adiós a sus opciones tras la justa, justísima expulsión de Mario, que cortó literalmente por lo sano, un arranque del Durán local desde su propio campo. La entrada fue tan fea y violenta, como precisa para los intereses de su propio club. Y es que un segundo gol local dinamitaba de inmediato cualquier atisbo de esperanza de marcar en cualquier jugada puntual.

La mínima victoria que registraba el marcador para los forasteros, no les servía para nada, ya que otorgaba la clasificación al cuadro local. Así que jugando con nueve, al Villa del Río C.F. no le quedaba otra que intentarlo a la desesperada, intentando meter balones en el área, aunque casi siempre sin la altura, ni el efecto deseado.

En el segundo minuto del tiempo añadido, llegaría el gol de la igualada local. Carlos Rueda y Rodri disputan un balón en el que jugador local, que acababa de entrar en la cancha, sale airoso y tras encarar a Coke, lo supera por el palo corto.

Lógicamente este  gol finiquitaba de inmediato y de manera anticipada la eliminatoria. Posteriormente hubo tiempo para dar un merecido homenaje a una institución en la entidad deportiva del Alto Guadiato. Y es que su capitán Pedro Gallego deja momentáneamente la práctica activa del fútbol debido a unos problemas de salud. Su sustitución, se convirtió en un más que merecido homenaje, por su dilatada trayectoria en el equipo, con un Casablancas puesto en pie, aplaudiendo a rabiar a uno de sus ídolos.

Los seguidores villarrenses desplazados a Peñarroya premian a su equipo con una merecida ovación.


El pitido final trajo sensaciones contrapuestas. La algarabía y la felicidad de los locales, empujados por una afición que promete desplazarse en masa a la gran final de Lucena, contrastaba con la seriedad y las lágrimas de los jugadores villarrenses, a los que sus aficionados supieron premiar con aplausos y gritos de ánimo. Y es que en ese momento se ponía punto y final a una temporada 2023/2024, que para el Villa del Río C.F. ha sido memorable. El play off, que era más un sueño que un imperativo, se convirtió en una realidad. Posteriormente se ha sabido competir y disfrutar del mismo, poniendo un decoroso punto final a una grandiosa temporada.

 

 

lunes, 13 de mayo de 2024

Felipe Veloso acerca a los peñarriblenses a la gran final.

Crónica partido ida semifinales Play Off de ascenso en la Primera Andaluza de Córdoba. Temporada 2023/2024.

 

Enorme primera parte de un Villa del Río C.F. penalizado por sus errores.

 

El bigoleador del partido, controla un balón ante Iván Román.

 

VILLA DEL RÍO C.F.  1   PEÑARROYA C.F.  2 

 



Villa del Río- Coke, Rodri, Madueño, Fran Soriano, Dani Frías, Durán, Paquito, Marcos, Tena, Javi Guerrero e Iván Román. También jugaron: Hugo, Quero, Juan Carlos, Juampe y Juanjo.


Peñarroya- Molero, Mario González, Pedro Gallego, Antonio Carlos, Gorka, Felipe, Chechu, Mario García, Felipe, Alvarito y Tate. También jugaron: Miguelillo, Rafa, Ignacio, Alberto Gallego, Ernesto y Carlos.


Árbitro- Víctor Expósito Márquez. Estuvo asistido en las bandas por Javier Epifanio López y Javier González Espinosa. Como cuarto árbitro estuvo Alberto Fernández Pistón. Amonestó a los locales Madueño, Dani Frías, Tena, Quero y Juampe y a los visitantes Mario García, Chechu, Álvaro, Ernesto y Rafa.

Goles-  1-0 (min. 18) Durán  1-1 (min. 58) Felipe Veloso  1-2 (min. 68) Felipe Veloso


Incidencias- La mejor entrada de la temporada se registró en el Polideportivo Municipal de Villa del Río, ya que aproximadamente fueron casi un millar de aficionados los que colapsaron los graderíos del recinto deportivo ribereño. Entre ellos unos doscientos aficionados visitantes llegados desde el Alto Guadiato, agrupados en torno al "Frente Terrible". En el minuto cincuenta de partido, el juego estuvo detenido durante unos cinco minutos, debido al balonazo sufrido en pleno rostro por un espectador, del que afortunadamente se recuperó.

El Presidente-delegado de la Federación Andaluza de Fútbol en Córdoba, Martín Torralbo Luque, hizo de delegado federativo en este partido.

 

Comentario y fotografías- Francisco J. García.

 

El Peñarroya Pueblonuevo C.F. da un paso de gigante hacia la final del play off de la Primera Andaluza de Córdoba, tras imponerse a domicilio al Villa del Río C.F. en el partido de ida de la ronda de semifinales.

Fue un partido memorable, por el enorme ambiente que había en los colapsados graderíos del Polideportivo Municipal. No solo hubo aficionados llegados de ambas poblaciones, sino de toda la comarca del Alto Guadalquivir y de la capital cordobesa.

Así que bajo ese incomparable marco arrancó un partido, que de inmediato puso de manifiesto, que el disputado por ambos equipos siete días antes, fue una historia totalmente diferente.

Fernando Tena se hace con el balón bajo la mirada de Chechu.


El conjunto visitante entra muy metido en el partido, sabedor de la importancia que puede tener cualquier balón, ubicado dentro del rectángulo de juego. Así que aparece tal y como se preveía, con un juego muy físico en el que no evitan los contactos y presionando la salida de balón de su oponente. Pero el Villa del Río C.F. aparece dando su mejor imagen, conscientes que una semifinal de play off no se juega todos los días y de inmediato, vuelve a aparecer ese dinamismo, esa verticalidad y ese empaque, que llevó a los villarrenses a esta ronda definitiva.

El local Durán avisa (min. 2) con un remate acrobático que se marcha arriba y un minuto más tarde, Mario García se erige en salvador de su equipo al despejar bajo palos un balón cabeceado por Javi Guerrero, que había superado a Molero e iba para dentro.

Se veía sorprendido el conjunto del Alto Guadiato por ese buen juego local, pero ellos seguían a lo suyo, firmes en defensa, aguantando las embestidas locales, para salir a la contra con el máximo rigor. Así en el minuto once, Felipe Veloso sirve en profundidad a Chechu, pero su remate final carece de puntería.

El veterano Antonio Carlos se dispone a sacar una falta.


Responde de inmediato Marcos, con un disparo desde la frontal, en el que Molero, bien situado, responde con acierto. Hasta que un minuto después, en el dieciocho, llegaría el primer gol del partido. Rodri por la banda derecha, hace una jugada personal con un gran slalom entre varios contrarios, para terminar cambiando el juego a la otra banda, donde Paquito, tal y como viene el balón, centra al corazón del área, donde el Durán villarrense, se anticipa a su marcador y mete el pie en el primer palo, para alojar el balón en las mallas.

En poco más de un cuarto de hora de juego, el Villa del Río C.F. había creado más peligro, en ocasiones y goles, que en todo el partido de la semana anterior.

La movilidad de Dani Frías, Marcos y Paquito traía en jaque a la defensa minera y Dani Frías remata flojo (min. 25) a las manos del portero.

Pero el principal temor de la parroquia local estaba en la facilidad con la que el Peñarroya Pueblonuevo C.F. creaba peligro. Un balonazo, un buen control y un disparo. Con esa ecuación, los pupilos de Ariel Montenegro eran capaces de inventarse una ocasión de gol. Y como buena prueba de ello, la jugada del minuto treinta y uno. El servicio en largo de Antonio Carlos, es bajado al suelo, como casi siempre, por Felipe Veloso cuyo remate se topa con un efectivo Coke.

Dani Frías intenta controlar un balón ante la mirada del árbitro.


Nunca sabe uno, como pudiera haber transcurrido el partido de haber sucedido una cosa u otra. Si hubiera tenido idéntico desenlace o si la historia hubiera sido totalmente diferente. Y es que en el tiempo añadido por el colegiado en el primer periodo, una arrancada de Rodri acaba con una asistencia a Javi Guerrero, que lo deja sólo ante Molero, pero el centrocampista villarrense fotografió su disparo y el meta visitante salió airoso del envite. Ahí pudo estar una de las claves del choque.

El entrenador local Fran Elena da instrucciones a sus jugadores en la pausa de hidratación.


Tras pasar por vestuarios, el partido comienza a cambiar de tendencia. Los del Alto Guadiato realizan cambios en su formación con la entrada de Miguelito e Ignacio. Tácticamente, dan un paso adelante, lo que obliga a un cierto repliegue de los locales, que ya no muestran esa frescura física del primer periodo, donde corrían y presionaban todos los balones.

La igualada llegaría a balón parado, donde la corpulencia física de los mineros, les hacía ser muy peligrosos en cualquier acción de este tipo. Fue tras una pérdida de Durán en medio campo, a la que se unió un defectuoso despeje de Madueño, que acabó en saque de esquina. Miguelito lo bota desde el costado zurdo y Felipe Veloso se anticipa a su marcador, para ejecutar a la perfección (salto, giro de cabeza y remate) un cabezazo al balón, que hizo que el mismo entrara como un obús en la portería de Coke.

Tate y Fran Soriano saltan para hacerse por un balón aéreo.


Se abría un partido totalmente diferente, en el que el Peñarroya Pueblonuevo C.F. seguía a lo suyo, tratando de llevar el juego a un tono muy físico y sin esquivar ningún tipo de contacto. Cualquier disputa de balón, implicaba la carga y el empujoncito pertinente, lo que contaba con el beneplácito de un colegiado mucho más firme y taxativo con las protestas que con este tipo de acciones.

La incorporación de Miguelito fue un estilete por la banda izquierda para los visitantes. Su velocidad y su desborde, provocaba continuas acciones de un cierto peligro, que algunas veces cortaba la defensa local y en otras, era Coke, el obligado a intervenir con acierto, como la del minuto sesenta y tres.

La remontada peñarriblense se culminaría en el minuto sesenta y ocho, cuando Iván Román se hace un lío con el balón y lo pierde, ante la presión de Felipe Veloso. El ariete se planta ante Coke, al que supera por el palo largo, aunque el meta llegó a rozar el balón.

Paquito intenta controlar el balón en una postura acrobática.


Quedaban poco más de veinte minutos por delante y el panorama se le complicaba en exceso a los locales. Y es que aunque desde el banquillo local se trató de oxigenar al equipo con los cinco relevos producidos, no es menos cierto, que el equipo perdió presencia en ataque.

Los locales apoyados por sus incondicionales, lo intentan por activa y por pasiva, pero el entramado defensivo visitante no mostraba fisura alguna. Tan solo el escurridizo Paquito, que en ocasiones tenía hasta tres contrarios enfrente, para cerrarle el paso, lo intentaba. Por cierto una caída suya en el área (min. 71), fue reclamada como un posible penalti, pero el colegiado no quiso saber nada de la citada jugada.

Rodri se anticipa a Miguelito en una jugada del partido.


Los minutos pasaban y aunque el descuento se preveía amplio, entre el incidente del balonazo al espectador, la pausa de hidratación y la entrada de las asistencias a jugadores, el partido siguió con el mismo argumento.

Pese al acoso de los locales, siempre pareció estar más cerca la rúbrica visitante que la igualada rojilla. Y es que con el equipo volcado, los huecos afloraron en su zaga. Ernesto en el añadido tuvo la posibilidad de hacer el tercero de los suyos, pero Coke volvió a estar acertado y dejó el marcador con esa mínima ventaja para los del Alto Guadiato.

El próximo domingo en el Estadio Municipal de Casasblancas llegará el partido de vuelta de esta eliminatoria semifinal del Play off de ascenso de Primera Andaluza. Los locales tienen un gol de ventaja, por lo que al Villa del Río C.F. solo le vale para pasar ronda, una victoria por dos goles de diferencia. Y es que no hay que olvidar, que si se produjera un mínimo triunfo villarrense, tras los noventa minutos reglamentarios, no habría prórroga y sería el Peñarroya Pueblonuevo C.F. quien accediese a la final, ya que al terminar la eliminatoria igualada, el equipo mejor clasificado en la liga regular sería quien obtendría el premio de la clasificación.