domingo, 11 de octubre de 2015

El Villa del Río deja escapar una renta de dos goles.

Una mala segunda mitad pasa factura al equipo.

 

Crónica 5 ª jornada Segunda División Andaluza. Grupo Córdoba.

Temporada 2015/2016.

 

VILLA DEL RÍO C.F. 2  

MONTILLA C.F. 2

 

Villa del Río- Pichín, Jesús, Corpas, Eladio, Germán (Ángel min. 59), Cris, José Luís, Juan Diego, Celso (Medina min. 62), Diego Aguilera (Robles min. 75) y Muñoz (Mariano min. 87).

Montilla- Manolo, Javi (Enmanuelle min. 34), Jesús del Moral, Manolo Luque, Paco, Joseda (Carlos min. 64), Tete (Luisma min. 91), Sergio (Paco Ruz min. 46), Manolo Ruz, Rafa y Paco Hierro.

 

Árbitro- Rafael García Jiménez. Estuvo auxiliado en las bandas por Alcalá Romero y Cádenas de Llano Delgado. Amonestó al local Cris, Corpas, Celso, Germán y Medina y a los visitantes Sergio, Joseda, Manolo Ruz y Carlos.

 

Goles-  1-0 (min. 13) Diego Aguilera  2-0 (min. 32) José Luís  2-1 (min. 65) Paco Hierro  2-2 (min. 90) Manolo Ruz

 

Incidencias- Unos doscientos cincuenta espectadores se dieron cita en el Polideportivo Municipal de Villa del Río. Llovió con cierta intensidad en los prolegómenos del partido, aunque durante el juego la lluvia quedó en una simple amenaza

 

Comentario- Francisco J. García

 

Un gol de Manolo Ruz con el partido agonizando dejó al Villa del Río con la miel en los labios y sin poder estrenar, tras cinco jornadas disputadas, su casillero de victorias en una tabla clasificatoria, en la que sigue ocupando los puestos bajos de la misma. Los villarrenses vieron como su rival le remontaba un marcador adverso de dos goles, en un segundo periodo en el que su conservadurismo táctico le jugó una mala pasada.

Y eso que nadie podía aventurar semejante desenlace tras la disputa de los primeros cuarenta y cinco minutos de juego, donde el Villa del Río salió muy intenso y con unas ganas enormes de solventar cuanto antes, esa asignatura pendiente que parece tener en el gol.

El técnico local Tomás Joven presenta novedades tácticas en su once inicial. El debutante Eladio entra en el eje de la defensa, lo que permite a Juan Diego pasar a su posición natural, en la vanguardia, como sustituto del lesionado Figo. La entrada de Jesús Madueño en el lateral es otro cambio significativo.

 

 

Tras unos primeros minutos de una pelea continua en el medio campo, los locales comienzan a triangular su juego, buscando sorprender con velocidad a una zaga montillana que se mostraba demasiado insegura.

Pudieron marcar los locales, con una doble oportunidad, en el minuto 12. Fue tras una escapada de José Luís, bien resuelta por Manolo en el mano a mano y su rechace fue enviado al palo por Juan Diego.

Fue la antesala del primer gol local, que llegaría un minuto más tarde, obra de Diego Aguilera que superó por arriba la media salida de Manolo.

La ventaja en el marcador debería haber tranquilizado a los locales, que sin embargo mostraban un inexplicable nerviosismo en la parcela defensiva, donde varias dudas entre Pichín y su defensa, sembraron el pánico entre la afición local.

En una de ellas, finalmente el portero villarrense estaría muy acertado al sacar junto al palo izquierdo un remate de Sergio que iba para dentro.

Pasaban los minutos y la emoción suplía la falta de buen juego ya que ambos conjuntos abusaban del patadón y el juego aéreo. Nadie echaba el balón al suelo y cuando se hacía, las imprecisiones afloraban más que los aciertos.

Curiosamente en una contra muy combinada, los locales harían su segundo gol. La definición de José Luís fue primorosa, con una vaselina perfecta superó a Manolo, tras haber "pinchado" el balón en un pase no menos preciso de Diego Aguilera.

La doble ventaja local obliga al técnico visitante David Algaba a realizar un cambio y Enmanuelle sustituye a Javi, por lo que Paco Hierro retrasa su posición al lateral zurdo.

Un lanzamiento de falta directa de Cris, que se estrelló en la escuadra, fue lo único reseñable en los minutos que restaron hasta el descanso.

 

 

Pero en la segunda mitad cambia la decoración del partido. Era lógico y esperado que el Montilla arriesgara tácticamente, por que el marcador no le valía. La lesión de Sergio permite la entrada de Paco Ruz como segundo delantero. Además Algaba, plantea una línea de tres en defensa (Jesús, Manolo Luque e Hierro) por lo que Paco acompaña a Joseda en el pivote defensivo. Su acumulación de hombres en el medio campo le permite monopolizar la posesión del balón, frente a un Villa del Río excesivamente replegado en su parcela. Una cosa es tratar de salir jugando a la contra, pero hacerlo con la línea defensiva al borde de tu propia área, resulta muy arriesgado. Además apenas mantenían la posesión del balón, la mejor manera de defender y sus apariciones ofensivas fueron tan aisladas como esporádicas. Estos errores tácticos resultarían decisivos.

El golazo de Paco Hierro en el minuto veinte de este periodo, trallazo desde muy lejos que entró por la escuadra tras tocar en el larguero, cambió los ánimos de unos y otros. Los locales comienzan a tener dudas y a los visitantes se les abre un halo de esperanza. Su abuso del fútbol directo, en la búsqueda de la segunda jugada, no le estaba resultando efectivo. Pero en el último suspiro, se encontraron con un inesperado regalo. Tras un centro desde la banda, la zaga local deja incomprensiblemente solo en el segundo palo a Manolo Ruz que solo tiene que cruzar el balón con su cabeza para hacer el gol del empate. Una igualada que sabe a gloria a los vinícolas, pero que deja muy tocado a un Villa del Río que sigue sin ganar, víctima de sus propios errores.

La próxima jornada el Villa del Río C.F. se desplazará hasta la barriada capitalina de Alcolea para enfrentarse a la U.D. Alcolea Los Ángeles, el próximo domingo día 18 a partir de las 12 de la mañana.